
Definitivamente un mal cálculo del cleptócrata lo tiene un un transitoria pero merecida prisión y con las alas cortadas. El inscribir su "plancha quemada" no resulta mas que un típico bluff mediatico de las tantas "estrategias" a los que nos tenía acostumbrados desde que le sentó mal el bacalo e inauguró "la Yuca" (es decir la trampa y la mentira) como forma de gobierno. No le queda más que usar su plancha para dejar bien liso su próximo traje de preso a rayas.