Todos, todos son perseguidos politicos, desde los fabricantes de firmas, los artistas montados en el carro de la cleptocracia fujimorista,los coimeros de la hiperinflacion, los que renuncian por fax o piden la prescripcion, que puede decir el pueblo en general que encima de sufrirlos, tiene que ser menospreciado con argumentos que suenan mas a "cachita" (burla).